"¿Así que entonces el problema es uno filosófico, Gabriel?" Pues yo diría que sí, querido lector. La filosofía definida es el "amor (del griego filos) al conocimiento (del griego sofía)". Y en términos prácticos, la filosofía es responsable de establecer los parámetros bajo los cuales llevamos a cabo cualquier proceso de pensamiento. Por ejemplo, cuando en la publicación anterior, el profesor describía a la ciencia como basada en "evidencia empírica y objetiva", esa definición no se la inventó el. Más bien, es una definición universal utilizada por todos los científicos alrededor del mundo. Mientras que en otras ramas de pensamiento (como la política) el uso de la precisión y la verdad no es esencial, la ciencia se lleva a cabo de tal manera que si un científico publica un experimento con métodos inadecuados o altera los resultados a su conveniencia, podemos estar seguros que de entre toda la comunidad científica, se levantará un individuo que llevará a cabo el mismo experimento, y cuando encuentre unos resultados diferentes, demostrará que el científico original se equivocó, y automáticamente el primero caerá en vergüenza, y el segundo, en gloria. Así funciona. Pero, toda esta metodología es el producto del análisis y desarrollo de un grupo de individuos que se enfocan en la Filosofía de la Ciencia. "¿Y cuál es el punto?" El punto, querido lector, es hacerte reflexionar. Recapitulemos:
Esta serie de artículos comenzó planteando una situación: ciertos religiosos y científicos dicen que la religión (o por lo menos creer que Dios existe) no es compatible con la ciencia. Para cuestionar esto, señalé tres científicos importantes que eran religiosos y su creencia no afectaba su capacidad de hacer ciencia. Continuamos nuestra discusión planteando la imposibilidad de definir la ciencia en términos científicos para así desestabilizar la postura que dice que solo la ciencia puede proveer verdades objetivas. Además, cuestioné la postura popular de que "lo único que existe es lo que puedo ver y sentir", llamada Naturalismo, utilizando como ejemplo la existencia de verdades morales y abstractas que no tienen propiedades físicas (no podemos ver ni sentir) pero que existen de todos modos. Y concluí ofreciendo una serie de preguntas para estimular el pensamiento en todos nosotros (creamos o no en el naturalismo). Todo esto con la intención de proveer un resumen bastante neutral y objetivo de la situación. Así que (¡yo espero!) los he dejado comiéndose las uñas, en el borde del asiento, locos por saber "¡¿qué surgirá, cómo vamos a cerrar la discusión, a quién le voy a dar la razón, quién va a ganar?!" Pues la cuestión no se trata de ganar y perder o de quién tiene la razón y quién no... Estamos discutiendo la esencia misma de cómo pensamos; de cómo muchas veces dejamos que lo que escuchamos por ahí, como viene de parte de una autoridad (ya sea un profesor, un pastor, un cura, un doctor en ciencia) lo aceptamos como verdad sin analizarlo, y luego lo repetimos (a veces hasta con arrogancia) sin quizás tomar unos minutos para cuestionar su validez. Esta discusión no se limita a simplemente la ciencia y la religión. Podemos extrapolarla a todo lo que pensamos, porque una vez aceptamos un marco de referencia, una cosmovisión, como cierto, ese marco afecta todo lo que vemos y pensamos. Si adoptamos un marco de referencia en el cual establecemos que la ocurrencia de eventos sobrenaturales es imposible, cuando alguien nos dice "¡Ocurrió un milagro! Mi mamá se hizo unos estudios y desapareció su cáncer.", automáticamente descartamos su hipótesis. Decimos "es imposible que los milagros ocurran porque estarían contradiciendo las leyes de la naturaleza." Y si la persona nos cuestiona, "¿Y cómo puedes explicar lo que ocurrió?" Le decimos, "pues, realmente no puedo decir ahora, pero seguramente existe una explicación puramente racional y científica para lo que ocurrió, simplemente todavía no la conocemos." Y es así cómo antes de analizar la postura propuesta (a priori), la descartamos porque no encaja con nuestro marco de referencia. Así que si estás esperando ver "quién gana", lamento decepcionarte... Pero no es el objetivo de esta serie de artículos analizar si el naturalismo es cierto o no o si es posible que Dios exista. ¡No seré tan atrevido de condensar asuntos tan complejos y sutiles en tres meros ensayos! Mi meta, como dice la página principal de este blog, es hacerte pensar, querido lector. Es crear un ambiente de discusión serio y sofisticado, y que juntos podamos compartir ideas, crecer intelectualmente y como individuos y seres pensantes en una sociedad llena de odio, de intolerancia, de ideas peligrosas y dañinas, y sobre todo, acercarnos cada día más a la Verdad. Ahora, si te interesa mi opinión, por supuesto como cristiano y como amante de la ciencia, comparto la idea de mis amigos Kepler, Galileo y Copérnico y es con gran asombro que cada vez que aprendo algo nuevo sobre nuestro increíble mundo, no me queda de otra que sentir una pura e inmensa adoración y admiración por ese Dios que sostiene la realidad en existencia. Pero no tenemos que dejarlo ahí. Para eso coloqué la encuesta al lado de este artículo (o al final del blog si estás visitando desde tu dispositivo móvil) y en la sección de "Escríbeme". Ahí puedes votar por qué tema te gustaría que discutiera o incluso sugerirme uno personalmente a través del email. Y para concluir en una nota positiva, si hay algo en lo que estamos 100% de acuerdo tanto los religiosos como los científicos serios y honestos, es que nada pero nada nada, se puede creer a ciegas. Todo lo que pensemos tiene que estar fundamentado en un cúmulo de evidencias razonables y convincentes que hagan más posible la certeza que la falsedad de nuestra postura. Así sea la existencia de Dios, o la localización de la mente en el cuerpo, o el desarrollo de la última ruta sintética de un fármaco, todas tienen que basarse en datos buenos y una teoría válida. ¿Pasarán la prueba el Naturalismo y la religión, particularmente el Cristianismo? Hasta la próxima, y recuerda siempre ser Simply Lógico. Vocabulario: 1) cosmovisión. (Calco del al. Weltanschauung). 1. f. Manera de ver e interpretar el mundo. 2) a priori. (Loc. lat.; literalmente 'de lo anterior'). 2. loc. adv. Antes de examinar el asunto de que se trata.
1 Comentario
thomas
3/4/2015 05:57:53 pm
Estimulante!
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AutorFilósofo por vocación, músico por pasión, seguidor de Jesús por decisión. Ah y médico en construcción, sí. |